Los niveles de prevención Secundaria y Terciaria se desarrollan paralelamente. De hecho, se trata de una aproximación multinivel, en la que trabajaremos individualmente con los alumnos directamente implicados, en pequeño grupo, y con todo el grupo clase. También con el profesorado y las familias.
En la prevención Secundaria efectuaremos actuaciones en relación al Centro, el Aula y el Alumnado:
Tomar conciencia y definir el fenómeno y posicionarse pública y claramente en contra de cualquier forma de maltrato. El profesorado, el personal no docente, el alumnado y las familias han de estar sensibilizados para saber reconocer las situaciones de riesgo.
Disponer de protocolos de actuación claros y prácticos y de canales de intervención que contemplen la actuación en el centro y la coordinación con otros agentes del entorno (Ocio y deporte, Servicios Sociales, Policía…).
Aplicar programas genéricos de prevención del acoso en la comunidad educativa: profesorado, personal no docente, alumnado y familias,…
Actividades de tutoría en el grupo de los alumnos implicados (mínimo de 4 a 6 sesiones), para explorar el fenómeno y tratarlo en la su dimensión social, con el objetivo de:
- Mostrar el rechazo de los adultos hacia estas acciones
- Sensibilizar a los alumnos de la gravedad de la situación
- Modificar los roles y patrones de reacción ante las situaciones de intimidación.
Siguiendo la Propuesta de intervención en el aula que se expone a continuación.
Seguimiento individualizado del alumnado en situación de riesgo o más vulnerable.
Propuesta de intervención en el aula
En las sesiones siguientes exploramos el fenómeno del maltrato conjuntamente con toda la clase (vídeos cortos, guías…) para «ventilar» las emociones y los tabúes en relación a este tema, evitando hablar, de momento, de lo que pueda suceder en clase. En la última sesión, una vez se ha hablado suficientemente del acoso (emociones, atribuciones, falsas creencias, dinámicas de grupo, implicaciones legales…), se tratará de facilitar que el grupo encuentre soluciones a lo que está pasando en el aula, para llegar a unos acuerdos mínimos de convivencia.
Iniciamos la intervención Secundaria administrando el cuestionario CESC a fin de obtener el mapa relacional del aula, y detectar los puntos fuertes y los débiles. Obtendremos los perfiles de riesgo y los alumnos con los que trabajar individualmente. También los alumnos prosociales, a los que motivaremos para crear redes de apoyo y reestructurar las relaciones entre los alumnos del grupo.
Paralelamente, trabajamos en pequeños grupos y individualmente en lo que ya sería la Prevención Terciaria.